Existen pocos fenómenos en la naturaleza tan potentes como un rayo, pero éstos se desvanecen en un abrir y cerrar de ojos. Existe una manera de tener un rayo en la mano, y esto es una fulgurita, o "rayo petrificado". Son formaciones vidriosas causadas por el impacto de un rayo en un suelo de arena o rocas expuestas.
Cuando un rayo golpea sobre la superficie de la tierra, el aumento repentino de la temperatura puede producir la fusión de los materiales que se encuentra a su paso en el suelo. Si el terreno es arenoso se forman entonces tubos verticales debido al material fundido, que pueden tener cerca de 12 milímetro de diámetro y ramificarse hasta 6 metros.
El resultado final es una fulgurita, que es un tubo hueco alineado con la estructura del rayo esencialmente de cristal, vidrio natural formado debido a la fusión de la arena gracias a las altas temperaturas del rayo.
En el mundo se dan alrededor de 16 millones de tormentas electricas cada año, pero para que se produzca una fulgurita las condiciones deben ser las adecuadas.
Fuente: Taringa.net, tejiendoelmundo.
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